La vendimia es la cosecha de la uva, y se realiza cuando ésta llega a su punto óptimo de maduración. Los vinos Cesilia son fruto de una vendimia manual, lo que supone elegir los racimos de una forma selectiva e inspeccionarlos antes de su entrada en la bodega. Para garantizar un óptimo estado en la recepción, los racimos son recogidos en pequeñas cajas de 15kg. para limitar su trituración.
Una vez en la bodega de Casa Sicilia, las distintas variedades de uva son separadas para respetar los aromas, gustos, características y evolución propios de cada una.
El proceso de fermentación consiste en convertir los azúcares del mosto en alcohol etílico. Nuestros depósitos de fermentación, de 150 Hl., son de acero inoxidable y están equipados de un sistema de temperatura controlada que permite una mayor extracción de los aromas, del color y de los taninos.
Añejando nuestros vinos mediante el proceso de crianza en barricas de roble francés y americano permitimos que evolucionen obteniendo nuevos sabores y aromas. Al ser parte de un ser viviente, la madera contiene componentes químicos agradables y el líquido absorbe pigmentos y sabores a través del alcohol, dotando de una mayor complejidad a nuestros caldos.
Tras la etapa de filtrado, donde se eliminan residuos y sedimentos, se procede a embotellar el vino. Este es el proceso mediante el cual se culmina una ardua labor de muchos meses llevada a cabo por los mejores profesionales de la región. Después del embotellado, se encapsulan y etiquetan las botellas de vino para que puedan ser distribuidas y degustadas por los paladares más exigentes.
Desde la vendimia hasta su embotellado, en el proceso de elaboración de nuestros vinos se fusionan perfectamente los métodos tradicionales de viticultura con las nuevas tecnologías para lograr las mejores condiciones de higiene y calidad.
El minucioso seguimiento de todos los procesos anteriores da como resultado la obtención de vinos de calidad de cada una de las variedades vendimiadas.