La bodega en la que actualmente se elaboran los vinos Cesilia tiene su origen en la heretat que el marqués de Romana creó en 1707: la Heretat de Cesilia.
El sistema de heretats fue escogido por el rey Jaume I para la repoblación y colonización de las tierras conquistadas. Una heretat era un conjunto de tierras unido con un criterio de explotación. Constaba básicamente de una casa, una huerta y una cantidad de tierra destinada al cultivo de cereales y viñas.
A principios del siglo XVIII el puerto de Alicante era el punto comercial más estratégico de la región, y los vinos de su comarca, cada vez más prestigiosos y más demandados por la élite europea, eran exportados en grandes cantidades. Entre los caldos que se elaboraban en las proximidades de Alicante destacaban los del Valle del Vinalopó, donde Novelda era la localidad más importante de la zona.
La finca de Casa Sicilia 1707 sigue hoy en día a las afueras de Novelda, en el mismo lugar donde el Marqués de la Romana vio nacer su heretat. Se extiende por cuatro parajes de Novelda: Alcaydías, Ledua, La Mola y Sicilia, y está situada en un congost, a escasa distancia del cerro de “La Mola”, en el que se encuentran el Santuario de Santa María Magdalena y el Castillo de La Mola (La Muela).
La familia Arias adquirió en 1984 esta hacienda, en la que esta desarrollando un ambicioso proyecto enológico. Mediante una interesante fusión de tradición y modernidad, y con un equipo de profesionales de alto nivel, han convertido a los vinos Cesilia en todo un símbolo del Mediterráneo.